La Ministra de Educación sueca Aida Hadzialic ha presentado su dimisión al cargo después de trascender que había conducido después de haber consumido alcohol (dos vasos de vino, en declaraciones de la propia ministra dimisionaria). Los hechos se produjeron en la ciudad de Malmo, después de regresar de un concierto que se había producido en Copenhague. Allí fue sometida a un control de alcoholemia que dio como resultado una tasa del 0,2 milígramos de alcohol en la sangre, considerada como delito en Suecia, si bien no en Dinamarca, en la cual el límite, a tal efecto establecido es de 0,5, según informan el periodista de Expressen Filip Johansson (13/08/2014).
Hadzialic, jurista de profesión, nació en Bosnia y llegó a Suecia en concepto de refugiada. Pertenece al miembro del Partido Socialdemócrata de Suecia y ha venido desempeñando su cargo ministerial desde el pasado 3 de octubre de 2014.
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